La descentralización se considera uno de los principios fundamentales de las criptomonedas, pero en la práctica da como resultado la centralización de los tokens en las billeteras de los propietarios de la mayor parte del suministro.
Token -meme dogecoin (DOGE) no es una excepción, ya que según BitInfoCharts, el 37,08% del suministro total está controlado por solo cinco direcciones, y la más grande acumula el 19,56%.
La actividad de las cripto ballenas no es casual, ya que en 2024 dogecoin mostró una rentabilidad del 331,16%, sin embargo, después de un máximo de $0,4665 el 8 de diciembre, al 31 de diciembre el precio de DOGE cayó un 32,22% a $0,31616. Desde entonces, la moneda se ha recuperado a sus actuales 0,38 dólares.
Desde principios de 2025, las ballenas han aumentado la tasa de ahorro, gracias a lo cual el activo digital ha ganado un 10,65% desde principios de año.
Del 1 al 2 de enero, los grandes inversores compraron más de 1,08 millones de DOGE, informó el renombrado criptoanalista Ali Martínez. Su activación es sin duda una fuerte señal alcista.
El analista Trader Tardigrade ha fijado un precio objetivo a largo plazo para dogecoin a 3,20 dólares, mientras que el investigador de criptomonedas TradingShot hizo un pronóstico más conservador de alcanzar 1,50 dólares en el primer trimestre de 2025.